Bienvenidos al espacio del proyecto cinéfilo - clásico de la Asociación Naufragio Saigón. Con él, respondemos
a los intereses de un grupo de amantes del cine anterior a 1975 por disfrutar de las que consideramos sus
grandes obras maestras.
No pretendemos ser una referencia, ni un espacio para eruditos; sólo un un punto de encuentro de amantes
del séptimo arte, ávidos por recuperar el buen gusto de lo que fue la época dorada del cine.

domingo, 11 de enero de 2015

Candidatas II Ciclo de Cine Clásico: Historias de Filadelfia (1940)


     Comenzamos la relación de posibles películas para este curso con la estupenda cinta de George Cukor.
     Con un excelente guión de Donal Ogden Stewart & Waldo Salt y B.S.O. de Franz Waxman, esta obra maestra cuenta con un excelente reparto entre los que se encuentran el gran Cary Grant, Katharine Hepburn y James Stewart como estrellas indiscutibles.
     Completan el elenco una nómina de buenos secundarios como Ruth Hussey, John Howard, Roland Young, John Halliday, Mary Nash, Virginia Weidler, Henry Daniell, Lionel Pape y Rex Evans.
     Los Lord, una familia acomodada de la época, prepara la segunda boda de Tracy Lord (Katharine Hepburn) con el rico George Kittredge (John Howard).
     El acontecimiento es cubierto por dos periodistas: Macauley Connor (James Stewart) y Elizabeth Imbrie (Ruth Hussey) invitados por el primer marido de Tracy, C.K. Dexter Haven (Cary Grant). 
     La película tuvo una excelente acogida de público y crítica, consiguiendo dos oscar: El de Mejor actor, que se llevó James Stewart -el único que conseguiría en toda su carrera, además del honorífico-, en dura competencia ese año con otros animales de la interpretación como Henry Fonda –Las uvas de la ira- Charles Chaplin -El Gran dictador- y Laurence Olivier -Rebeca- y el de Mejor Guión Adaptadado.
     Katharine Herpburn consiguió el prestigioso premio a la mejor actriz del círculo de críticos cinematográficos de Nueva York y supuso un gran cambio de tendencia en su carrera, ya que sus anteriores interpretaciones cinematográficas habían supuesto verdaderos fiascos en taquilla. Fue su pareja de entonces, Howard Hughes, quien compró los derechos cinematográficos de la obra, para relanzar la carrera de Katharine (y vaya si lo consiguió) a sabiendas que el papel era perfecto para ella, habiéndolo interpretado más de 400 veces en su versión teatral de Broadway.
     Queda claro que el valor de las estatuillas no era equiparable al que estamos acostumbrados a contemplar en nuestra época. Para coomprobarlo sólo hay que ver los galardones concedidos por la academia aquel año:

Mejor Película: Rebeca (A. Hitchcock).
Mejor director: John Ford (Las uvas de la ira).
Mejor actriz: Ginger Rogers (Espejismo de amor).
Mejor guión original: Preston Sturges (El gran McGinty)
Mejor actor de reparto: Walter Brennan (El forastero).
Mejor actriz de Reparto: Jane Darwell (Las uvas de la ira).
Mejor B.S.O.: Alfred Newman (Tin Pan Alley)

     Con todo esto, las triunfadoras de la gala fueron El Ladrón de Bagdad (3 oscar, la mayoría técnicos), Las uvas de la Ira (2) Rebeca (2, incluyendo el de mejor película) y Pinocho (2 estatuillas: BSO y canción).
   
James Stewart recogiendo su oscar honorífico.
     Para comprobar la competitividad y el talento cinematográfico de aquellos años, conviene recordar que algunas películas, consideradas hoy día joyas del séptimo arte, no recibieron ningún galardón de la academia. Entre las olvidadas” podemos citar:
- El Gran dictador (C. Chaplin), con 5 nominaciones.
- Enviado especial (A. Hitchcock) con 6.
- La carta (7 nominaciones)
- Hombres intrépidos (6).

Sobre el director:
http://uh.edicosma.com/_uploads/websRepositorio/repositorio_obj_1235_1380190892.jpg

       George Cukor, hijo de inmigrantes húngaros judíos, tuvo sus comienzos en el teatro, y fue considerado por muchos durante algún tiempo como un director menor, si bien poco a poco se fue haciendo su merecido hueco en Hollywood. Incluso pudo haber sido el director de Lo Que El Viento Se Llevó, llegando a dirigir las primeras fases del proyecto.
     Fue considerado por muchos como un director de actrices, por saber sacar el mejor lado interpretativo de las muchas estrellas femeninas a las que pudo dirigir, entre ellas su gran musa: Katharine Herpburn.
     También destacaron las interpretaciones de Judy Holliday, como la realizada en Nacida Ayer, destacando también otros filmes como Ha Nacido Una Estrella, que le abrió las puertas a la dirección de melodramas de éxito, compaginándolos con sus conocidas comedias románticas. Su última gran producción para los grandes estudios, cuya sistema en decadencia arrastró la carrera del director, fue My Fair Lady con la memorable interpretación de Audrey Herpburn.

         http://www.cineforever.com/wp-content/uploads/2011/01/kate.jpg

El director y su musa, en un momento del rodaje.
    


     Parece ser que su condición de homosexual, lo cual mostraba abiertamente, le cerró las puertas del éxito en varias ocasiones. Precisamente, la superación de la castración que provoca la sociedad con sus convencionalismos y tabúes, y la búsqueda de la felicidad a través de liberarse de estas limitaciones, fueron las principales constantes en la obra de Cukor, tal y como aparecen en Historias de Filadelfia.
     La academia le concedió un único oscar como director por Mi bella dama (1964) siendo candidato por Mujercitas (1933) Doble Vida (1947) Nacida Ayer (1950) y, como no, por la película que hoy traemos a nuestro ciclo.


Para seguir leyendo:

http://ciclos-decine.blogspot.com.es/2011/03/historias-de-philadelphia.html (Estupendo blog de cine).

http://24vecesxsegundo.blogspot.com.es/2011/01/hola-pelirroja-historias-de-filadelfia.html  (24 veces por segundo).

miércoles, 26 de noviembre de 2014

¿Era Cary Grant víctima de la Hiperactividad?

Resulta curioso comprobar el desconocimiento que tiene el público en general - incluidos, periodistas de medios digitales - de algunos trastornos que en realidad pueden ser bastante incapacitantes para el individuo, especialmente en sus primeros años.
El pequeño Archie y su madre, víctima de una grave enfermedad mental.
Este desconocimiento, y el hecho de que se "diagnostiquen" a la ligera y por personas que tienen pocos conocimientos sobre el tema, a famosos con determinadas patologías (A Tom Cruise, por ejemplo, lo podemos encontrar según qué página web como disléxico, hiperactivo o bipolar) hace que se tomen también a la ligera las repercusiones y las medidas que se deben tomar ante un niño con TDAH, el cual puede causar mucho sufrimiento en todo el entorno familiar.

Por ello, y tras consultar la lista de personajes famosos con TDAH que se nos ofrecía en los enlaces del curso, además de echar mano de mi particular vena cinéfila, he decidido indagar en la posibilidad de este trastorno en uno de mis actores favoritos de todos los tiempos, cuya desgraciada existencia puede identificarse, si bien no categóricamente, como propia de un Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad.

Nos referimos a Archibal Alexander Leach, o como todos siempre lo recordaremos: Cary Grant.

El que fuese uno de los principales actores de la historia del Cine (Sólo en segundo lugar, después de Humpfrey Bogart, según el American Film Institute) no tuvo una vida personal especialmente feliz, muy al contrario de la exquisita y envidiable imagen que proyectaba en sus películas.

No sabemos si "a causa de", principalmente porque en este curso estamos aprendiendo que el TDAH es de origen neurobiológico, pero Cary Grant desarrolló síntomas propios de este trastorno tras una serie de acontecimientos desgraciados en la familia.
Su padre abandonó a su madre para casarse con otra mujer, ingresando a ésta en un sanatorio mental y ocultando su existencia a sus hijos hasta que el actor tuvo treinta años.

Su comportamiento, altamente disruptivo, recibió continuas reprimendas en el colegio, destacándose continuos altercados y peleas, una de las cuales supuso su expulsión del colegio. Se describía como incapaz de centrarse y de mantener la atención demasiado tiempo en nada, especialmente si no le interesaba.

Sus continuos devaneos entre todo tipo de actividades, le llevaron a ocupar múltiples oficios, de los cuales era generalmente despedido, hasta que su imponente físico llamó la atención de algunos productores que le dieron sus primeros trabajos como extra, para ocupar posteriormente el lugar que le esperaba en el firmamento cinematográfico.

En Madame Butterfly (1932)
Uno de los comentarios más significativos que podemos añadir para su caracterización como TDAH, fue el realizado por uno de sus principales valedores, Sir Alfred Hitchcock: <<No lo diriges; simplemente lo pones delante de la cámara>> Y es que Grant era muy, muy difícil de llevar, lo que hizo que algunos directores no quisieran contar con sus servicios si no era una imposición expresa de los grandes estudios.
Sorprendía también su dificultad para memorizar los guiones, lo que nos lleva también a la sospecha de poca capacidad de atención.

Si atendemos a los criterios del DSM - V, existen séis o más síntomas que probablemente cumpliera el pequeño Archie, a saber:

A- Patrón persistente de inatención y/o hiperactividad-impulsividad que interfiere con el funcionamiento o desarrollo que se caracteriza por (1) y/o (2):

1. Inatención

Seis (o más) de los siguientes síntomas se han mantenido durante al menos 6 meses en un grado que no concuerda con el nivel de desarrollo y que afecta directamente las actividades sociales y académicas/laborales:

NOTA: Los síntomas no son sólo una manifestación del comportamiento de oposición, desafío, hostilidad o fracaso para comprender las tareas o instrucciones. Para adolescentes mayores y adultos (a partir de 17 años de edad), se requiere un mínimo de 5 síntomas.

a. Con frecuencia falla en prestar la debida atención a los detalles o por descuido se cometen errores en las tareas escolares, en el trabajo o durante otras actividades (por ejemplo, se pasan por alto o se pierden detalles, el trabajo no se lleva a cabo con precisión).
Con su amigo íntimo y 'novio' Randolph Scott
b. Con frecuencia tiene dificultades para mantener la atención en tareas o actividades recreativas (por ejemplo, tiene dificultad para mantener la atención en clases, conversaciones o lectura prolongada).
c. Con frecuencia parece no escuchar cuando se le habla directamente (por ejemplo, parece tener la mente en otras cosas, incluso en ausencia de cualquier distracción aparente).
d. Con frecuencia no sigue las instrucciones y no termina las tareas escolares, los quehaceres o los deberes laborales (por ejemplo, inicia tareas pero se distrae rápidamente y se evade con facilidad).
e. Con frecuencia tiene dificultad para organizar tareas y actividades (por ejemplo, dificultad para gestionar tareas secuenciales; dificultad para poner los materiales y pertenencias en orden; descuido y desorganización en el trabajo; mala gestión del tiempo; no cumple los plazos).
f. Con frecuencia evita, le disgusta o se muestra poco entusiasta en iniciar tareas que requieren un esfuerzo mental sostenido (por ejemplo tareas escolares o quehaceres domésticos; en adolescentes mayores y adultos, preparación de informes, completar formularios, revisar artículos largos).
g. Con frecuencia pierde cosas necesarias para tareas o actividades (por ejemplo, materiales escolares, lápices, libros, instrumentos, billetero, llaves, papeles de trabajo, gafas, móvil).
h. Con frecuencia se distrae con facilidad por estímulos externos (para adolescentes mayores y adultos, puede incluir pensamientos no relacionados).
i. Con frecuencia olvida las actividades cotidianas (por ejemplo, hacer las tareas, hacer las diligencias; en adolescentes mayores y adultos, devolver las llamadas, pagar las facturas, acudir a las citas).


2. Hiperactividad e Impulsividad
Seis (o más) de los siguientes síntomas se han mantenido durante al menos 6 meses en un grado que no concuerda con el nivel de desarrollo y que afecta directamente las actividades sociales y académicas/laborales:

NOTA: Los síntomas no son sólo una manifestación del comportamiento de oposición, desafío, hostilidad o fracaso para comprender las tareas o instrucciones. Para adolescentes mayores y adultos (a partir de 17 años de edad), se requiere un mínimo de 5 síntomas.

a. Con frecuencia juguetea o golpea con las manos o los pies o se retuerce en el asiento.
b. Con frecuencia se levanta en situaciones en que se espera que permanezca sentado (por ejemplo, se levanta en clase, en la oficina o en otro lugar de trabajo, en situaciones que requieren mantenerse en su lugar.
c. Con frecuencia corretea o trepa en situaciones en las que no resulta apropiado. (Nota: En adolescentes o adultos, puede limitarse a estar inquieto.).
d. Con frecuencia es incapaz de jugar o de ocuparse tranquilamente en actividades recreativas.
e. Con frecuencia está “ocupado”, actuando como si “lo impulsara un motor” (por ejemplo, es incapaz de estar o se siente incómodo estando quieto durante un tiempo prolongado, como en restaurantes, reuniones; los otros pueden pensar que está intranquilo o que le resulta difícil seguirlos).
f. Con frecuencia habla excesivamente.
g. Con frecuencia responde inesperadamente o antes de que se haya concluido una pregunta (por ejemplo, termina las frases de otros; no respeta el turno de conversación).
h. Con frecuencia le es difícil esperar su turno (por ejemplo, mientras espera una cola).
i. Con frecuencia interrumpe o se inmiscuye con otros (por ejemplo, se mete en las conversaciones, juegos o actividades; puede empezar a utilizar las cosas de otras personas sin esperar o recibir permiso; en adolescentes y adultos, puede inmiscuirse o adelantarse a lo que hacen los otros).

B- Algunos síntomas de inatención o hiperactivo-impulsivos estaban presentes antes de los 12 años.
C- Varios síntomas de inatención o hiperactivo-impulsivos están presentes en dos o más contextos (por ejemplo, en casa, en el colegio o el trabajo; con los amigos o familiares; en otras actividades).
D- Existen pruebas claras de que los síntomas interfieren con el funcionamiento social, académico o laboral, o reducen la calidad de los mismos.
E- Los síntomas no se producen exclusivamente durante el curso de la esquizofrenia o de otro trastorno psicótico y no se explican mejor por otro trastorno mental (por ejemplo, trastorno del estado de ánimo, trastorno de ansiedad, trastorno disociativo, trastorno de la personalidad, intoxicación o abstinencia de sustancias).

En función de los resultados se podrán clasificar las siguientes presentaciones:
Presentación combinada: Si se cumplen el Criterio A1 (inatención) y el Criterio A2 (hiperactividad-impulsividad) durante los últimos 6 meses.
Presentación predominante con falta de atención: Si se cumple el Criterio A1 pero no se cumple el criterio A2 (hiperactividad-impulsividad) durante los últimos 6 meses.
Presentación predominante hiperactiva/impulsiva: Si se cumple el Criterio A2 (hiperactividad-impulsividad) y no se cumple el Criterio A1 (inatención) durante los últimos 6 meses.
Por tanto, en este caso, sí que podríamos sospechar que existiese un patrón de Hiperactividad que, debido al desconocimiento y caracterización del trastorno existente en la época que le tocó vivir, fuera confundido con gamberrismo o vandalismo.

Como decía el viejo psiquiatra <<Es un trastorno si provoca un trastorno>> (en la esfera personal, social y laboral/académica). Está claro que, fuese cual fuese el trastorno, éste provoco una gran infelicidad en el célebre actor, que le desembocó en cinco matrimonios fallidos, sin contar las innumerables y tórridas relaciones que no aparecen en su "currículum" y la imposibilidad de mantener unas relaciones estables y duraderas, ni siquiera entre sus amigos, amén de no poder terminar sus estudios primarios por su incapacidad para adaptarse a las férreas normas establecidas en el entorno escolar de su Inglaterra natal.

Están documentadas las consecuencias en la esfera personal y social del trastorno en la vida de este actor.  Descatan su adicción al alcohol y a otras sustancias psicotrópicas en la edad adulta, la más conocida de ellas el LSD, con lo que aparecerían caracterizadas algunas de las consecuencias del trastorno en la edad adulta, si nos fijamos en el siguiente cuadro:


miércoles, 28 de mayo de 2014

Nueva Sesión del Ciclo de Cine Clásico:  Con Faldas y a lo Loco.

El próximo viernes, 30 de mayo, a las 19:00 en el salón de actos del CEIP Juan Valera de Cabra, y con la presentación de Sensi Budia, cerraremos temporada de nuestro Ciclo de Cine Clásico con uno de los más destacados títulos de nuestro adorado Billy Wilder: Con Faldas y a lo Loco.

Basada en una historia escrita por Robert Thoeren y Michael Logan, esta maravillosa comedia forma parte de las que podríamos llamar obras maestras por aclamación, entre otros motivos por  por su célebre diálogo final, colofón de un excelso guión de Billy Wilder - I.A.L. Diamond.
Cartel de la versión en italiano.
El filme reproduce algunos de los arquetipos del cine clásico, como el romance imposible entre dos seres de mundos distintos, Tony Curtis y Marilyn Monroe, el humor a través del absurdo de dos buscavidas capaces de todo con tal de sobrevivir -el mismo Curtis y uno de los fetiches del director, Jack Lemmon-  la transformación en el rol sexual o travestismo, repetido por grandes del celuloide en años posteriores - Recuérdense por ejemplo los casos de Dustin Hoffman en Tootsie, Robin Willians en Señora Dobtfire o el mismísimo José Luis López Vázquez en Mi querida Señorita , por citar sólo algunos títulos- .

Otro tópico, frecuente en Wilder, es la lucha entre las apariencias y la propia naturaleza, entre lo que se es y lo que se parece ser, presente sobremanera en una de sus primeras películas: El Mayor y La Menor, en la que todo es un equívoco y cualquier giro lleva a confusión.

Some like it hot –título orginal en EE.UU.- posee además la maestría en el ritmo, capaz de hacer pasar dos horas como un simple suspiro, donde las escenas se suceden sin solución de continuidad y con variados efectos que van desde la lástima hacia una situación dramática del sueño americano –donde millonarios con yate conviven con personajes casi sin techo- la irrupción por momentos del cine negro y los gangsters.

Resulta curioso que Wilder  declarara frecuentemente en las entrevistas que no le gustaba mezclar estilos. ¿Qué le vamos a a hacer, Billy? Nadie es perfecto.


Curiosidades de la Película:

- El director, pidió a Marilyn que adelgazase para el rodaje, porque le notaba algo de sobrepeso, a lo que ésta respondió: <<¿Qué quieres, que no me distingan de Jack Lemon y Tony Curtis?>>

- Para muchos, esta película es un re-make o refrito de de la alemana Ellas somos nosotros (Fanfaren der Liebe - literalmente, Fanfarrias de amor -, 1951), con argumento del propio Logan y dirigida por Kurt Hoffmann (1910 - 2001).

- Es la segunda película que vemos en nuestro ciclo de 1959. Aquel año, en los premios Oscar, arrasó Ben-Hur. El curso cinematográfico fue tan prolífico que decir que esta película sólo ganó una estatuilla (por el diseño de vestuario en blanco y negro) no desmerece en absoluto, si tenemos en cuenta que otras obras maestras como Con La Muerte En Los Talones e Historia De Una Monja, no recibieron galardón alguno.

- Marilyn Monroe tuvo problemas para recordar el texto. Tanto fue así, que la actriz tuvo que ir colocando el guion en distintos lugares del set de rodaje.

- Marilyn Monroe tuvo que faltar a varias sesiones del rodaje debido a su embarazo.

- Tony Curtis comentó que «besar a Marilyn Monroe es peor que besar a Hitler». En 2001, algo más de cuarenta años después, negó haberlo dicho.

-  La película contiene homenajes a las películas de gángsters de los años 30, así como ciertas ironías sobre los Estados Unidos de 1929: divorcios de famosos, la seguridad de la bolsa (que ese mismo año se derrumbó e inició una crisis económica) o la muerte de Rodolfo Valentino.

-  Marilyn Monroe canta I Wanna Be Loved By You, canción que hizo mundialmente famosa.

- La película ha sido considerada de "significado cultural" por la Biblioteca del Congreso de Washington y seleccionada para su preservación en el National Film Registry.

viernes, 7 de marzo de 2014

Un náufrago en el cine.


Todos conocemos su prodigiosa facilidad para la poesía, para la prosa y para la música. Muy pocos, sin embargo, eran los que conocían su poder interpretativo. 
Aunque su pasión es el teatro, Manuel Delgado también comienza a realizar incursiones en el cine. Aquí lo vemos en el corto viviendo con ella, primera producción de este tipo de la Escuela de Teatro de Córdoba. 
Enhorabuena a nuestro compañero saigonista y a todo el equipo de la ETC que lo ha realizado.
Firmando el Cartel